Me veo al espejo y aparecen unas arruguitas en mi frente. Son 3 líneas. Se ven más o menos dependiendo del día y la sequedad de mi piel. También se empieza a ver una línea suave en el entrecejo y 3 rayitas al costado de los ojos. ¿Serán esas famosas patas de gallo a las que nunca le di bola porque no tenía?
Voy viendo como aparecen y desaparecen. Coquetean con mi rostro. Se quedan y se van.
El celular me muestra un recuerdo de hace 7 años. “Ah, qué cara de nena”, pienso. Mi rostro está cambiando y me doy cuenta. Me estoy transformando. El paso del tiempo no para. Yo quisiera detenerlo y gritarle: “¡sumame años, pero no arrugas!”.
¿Me seguirán dando 10 años menos de los que tengo? Habitualmente la gente se sorprende con mis 36.
Todavía no tengo 40. Pero uh, tampoco están tan lejos. Estoy más cerca de eso que de los veinti.
En mi grupo de amigas se empieza a hablar del bótox. Escucho. Me tienta la idea. Lo digo en voz alta y una de ellas me mira como diciendo “¡me extraña de vos!”. Sí, yo, la feminista que juega con la idea de inyectarse algo que le estire la piel. Debería leer “El mito de la belleza” de Naomi Wolf. Busco en Google alguna frase que me de pistas, argumentos que me disuadan de hacerlo. Y entonces, encuentro: “La dieta es el sedante político más potente de la historia de las mujeres”. No habla precisamente del bótox, pero infiero que el concepto va por ahí.
Qué cruel es el paso del tiempo con nosotras.
¿Voy a poder seguir siendo como soy? ¿O tengo que empezar a impostar la voz para parecer una señora? ¿Las arrugas vienen también con un cambio en las cuerdas vocales?
Acaricio a mis nuevas compañeras. A mis rasgos más definidos. A este cuerpo que no siento mío. Acaricio la idea de que crecer es también parir una nueva identidad una y otra vez.
Confesiones culposas que nos pasan a todas. En la que no solo nos preguntamos será bueno para mí cuerpo, sino también en el rol femenino de aceptarnos tal cual somos.
Para colmo Google que te recuerda todo el tiempo lo que fuiste, en una época en la que no solo estás enfocada en lograr y ser quien querés ser a futuro, sino también que te recuerda todo lo que fuiste y ya no sos. ¿Entonces cuando hay un tiempo para nosotras en este momento ?